martes, 25 de diciembre de 2012

Moldes de alginato

Después de un parón obligado por estudios, hoy quiero mostraros el alginato. El alginato es un producto comúnmente usado por dentistas para realizar un molde de nuestra dentadura. Particularmente es un producto que me encanta, ya que es capaz de captar el más mínimo detalle del modelo que queremos reproducir.
Conseguirlo es relativamente sencillo, ya que lo venden en diversas tiendas destinadas a dentistas. Por otro lado su utilización puede ser más complicada, dependiendo de la maña de cada uno y siempre después de una pequeña prueba para habituarte al producto.
En este caso yo he trabajado con él en varias ocasiones (la última hace unos meses en 2º de escultura, la primera hace ya 5 años en 1º de caracterización) y os voy a contar diferentes maneras de utilizarlo y de cagarla XD.
Lo primero es la mezcla, este producto se presenta en polvo y se mezcla con su proporción justa de agua. Y esta parte es muy importante, ya que si hay poca agua no cuaja y si hay demasiada se queda liquido e inservible. Lo mejor que podéis hacer es seguir las instrucciones del fabricante que vienen en el envase, donde explica la cantidad de agua por cazito de polvo. El polvo de alginato se introduce en cuencos especiales de plástico flexible y seguidamente se echa el agua de golpe, removiendo seguidamente y con rapidez. Es un producto que no da tiempo a pensar en musarañas, hay que aplicarlo con rapidez y seguidamente aplicar la escayola. Por lo tanto, antes de comenzar tenemos que tener lista la masa de escayola, después hacer la mezcla de alginato y aplicarlo en el modelo y seguidamente poner encima la escayola que estará (o debería) ya en punto de yogurt.
Para hacer una mano: Si solo queremos una parte la realización es sencilla, la mano posada en una tabla y la realización dicha anteriormente. Esperamos a que la escayola fragüe y listo.
Si lo que queremos es hacer la mano completa, la cosa se complica. Se puede hacer de dos formas: Una más sencilla, pero que gasta más alginato y otra más difícil que gasta lo justo. En el primer caso, simplemente introducimos la mezcla en una botella de plástico (que hará la función de la escayola) y después la mano. Esperamos a que frague un poco y sacamos la mano con cuidado. Para sacar la reproducción introducimos la escayola y cuando se endurezca cortamos la botella y el alginato.
La otra forma consiste en, aplicar el alginato por toda la mano y seguidamente aplicar la escayola. Hasta aquí todo igual, la diferencia empieza cuando la escayola ya está casi fraguada. En este momento se realiza un corte en la escayola, de tal manera que la pieza queda separada en dos mitades. Este corte se hará donde sea más conveniente según el modelo a reproducir y una vez hecho esperamos a que la escayola frague del todo. Para finalizar, nos ayudamos del ligero corte realizado anteriormente para separar las dos mitades. 
Esta segunda forma de realizar el molde es más adecuada para hacer cualquier tipo de modelo, ya que con la botella tienen que ser moldelos que se puedan sacar fácilmente sin enganches. 
Otra de las cosas que he hecho con alginato es el molde de la cara. La realización es de la misma manera que anteriormente, pero hay que tener más cuidado con no tapar los agujeros nasales y antes de empezar aplicar vaselina por la cara especialmente en las cejas y cualquier tipo de vello facial. Se pueden utilizar pequeños cilindros (pajitas) para respirar, aunque cuando me lo hicieron a mi preferí no usarlos, ya que me costaba respirar. 


Para finalizar este trabajo resta sacar la copia. En caso de medio molde, echamos escayola antes de sobrepasar el borde. En el caso de moldes completos, se juntan las dos mitades y se introduce la escayola (recomiendo , en el caso de las manos, introducir hierros en los dedos) se espera al fraguado y se separan las dos mitades del molde.
Es un material para hacer copias en el momento, ya que según pasa el tiempo el alginato, seco, mengua.
Os comenté cosas que he realizado pero se puede aplicar para lo que queraís, también realizamos dentaduras para lo que es necesario determinado aparato, que se adapta a los dientes y que actuaría como la escayola.